Cal Marquès - Camprodon, Girona

Alba Núñez

Excelente restaurante. Fui un viernes y tienen un menú de mediodía de 24,90€ que incluye un primer plato, segundo, postre y bebida.
El lugar es muy bonito, te atienden fenomenal y la comida fantástica.
Es el mejor coulant de chocolate que he probado nunca, preparado al momento.

Goosep Motero Gourmet

Les falta un punto… muy grande, para la excelencia

Un entorno muy bonito al tratarse de un edificio histórico, pero le falta calor que ganarian con una iluminación mejorada, plantas y alguna escultura.

Un pan excelente con una costra muy bien estructurada y una carta de vinos excelente pero… ¿Porqué no estructuran la carta por tipo de uva que es lo lógico?

Un aperitivo de crema de esparragos, pan de sesamo y mini pan sarraceno muy bueno pero le faltaba algo…

Los primeros a buen nivel, mifullas con foie con fresas y vieiras, alcachofa y jamón ibérico, ligeramente salado, pero bien elaborado. Lástima que en un plato ondo con ala ancha tendria más prestancia y se trabajaria mejor con los cubiertos.

En los segundos fracaso total, pies de cerdo sin más con all-i-oli que no llegó y tartar de ternera, que no steak tartar según la maitre al quejarnos, literalmente crudo aunque macerado, no cocido según el mismo criterio, que solo era carne cruda con grasa cortada. Lo he dejado sin comer porque era incomible y ni intentando arregrarlo ha mejorado. Lo peor es que me han dado un master de lo que no es un steak a pesar de que el ponente creia que si tenia los suficientes conocimientos para denigrar mi opinión.

En fin, lugar venido a menos que no ofrece ninguna experiencia gastronómica a pesar de que el precio, 60€ por persona sin postre, lo podria parecer, carentes de formación tanto en sala como en cocina y el servicio se eterniza por la lentitud en sala.

Me han traido la cuenta cobrandome el steak aunque luego sin mediar queja, han venido y de malas formas lo han descontado de la minuta final.

Para no recomendarlo por supuesto, hay otras opciones en el pueblo menos presuntuosas pero más cercanss al territorio.

Mònica Valdueza

Fuimos a cenar sábado por la noche mi pareja y yo. Sin duda una experiencia inmejorable. Ambiente tranquilo y acogedor. Trato de 10 tanto por parte del camarero como del cocinero; muy cercanos y atentos en todo momento, hecho que nos hizo sentir agusto y relajados durante toda la velada.
Además, la comida estaba increible. Calidad-precio adecuada.
No tenemos malas palabras en nada. Sin duda, lo recomendamos y volveremos.

Pere Patuel

Hoy 25 de Marzo , mi familia hemos parado a comer en Cal Marqués. Nos lo habían recomendado unos amigos.
Error nuestro por no mirar la carta previamente ya que íbamos con la niña, però cuando vas a un sitio a comer te esperas que adapten un poquito solo un poquito la comida de los peques . En este lugar no ha sido el caso. Empezamos a explicar lo sucedido.
Nos hemos sentado y como en todos los lugares pedimos trona para la peque, nos han dicho que no tenían ( ningún problema ya que somos padres precavidos y en el coche teníamos una trona adaptable y la hemos ido a buscar). Cuando hemos visto la carta hemos estado buscando algo para la peque y hemos visto que en la carta había filete y Bacalao. Como siempre le hemos preguntado a nuestra hija que le apetecía y nos ha dicho pescado con patatas fritas y le hemos Pedido si podía ser, acompañado de patatas fritas ya que ha todo niño les encantan las patatas y nos ha dicho que no que no lo hacían, que tenia que ser con un pure de patatas. Mi pregunta es si tienen patatas para hacer puré, que cuesta hacer unas simple patatas fritas cuadradas, largas, rectangulares o de la forma que quieran pero unas simples patatas fritas para una niña/o. Los propietarios de este restaurante o la Maitre/ Sumillere una vez le Hemos pedido el vino por cierto muy bueno, nos ha comentado que tenia un niño/a y me pregunto si le gustaría ir a un sitio i que le dijeran que el niño tiene que comer lo que hay en la carta, en su carta había liebre a la royal, guiso de rabo de vaca, raviolis de gamba, ensaladas , quizás ella o los niños que van a este restaurante tienen la gran suerte de comer estas cosas peró nuestra hija no tenemos esta suerte. La suerte es que come como una niña de 3 años y come sus macarrones, su arroz, sus verduritas hervidas, sus patatas fritas, en fin…. No hemos pedido nada del otro mundo simplemente unas fritas no quiero pensar si un padre pide macarroneS .
Ha sido una comida muy incomoda ya que nuestra hija no ha comido de nada ya que el plato que le han preparado no le ha entrado ni por los ojos ni por la boca ya que venia con un puré líquido de patata sin mas y un trozo de Bacalaó
y lo mas feo de todo que la propia dueña no ha sido capaz de adaptar nada para la peque. Hemos comido y hemos marchado pero realmente esta reseña, espero que sirva para quien la lea y tenga hijos , que no pare a Cal Marques ya que niños no quieren. No somos de poner reseñas pero hoy hemos salido muy enfadados y al final cuando pasan estas cosas y trabajas en el sector te quema por dentro. Tenemos restaurante y nosotros nos adaptamos con lo que haga falta y sobretodo con los niños ( al menos con lo que esta en nuestro alcanze, pero nos adaptamos). En fin muchas gracias y espero que algún dia este restaurante tenga un poquito de corazón con los peques. Un placer

Tamara Rodríguez Araya

Súper recomendable! La comida exquisita, el servicio muy amable y atento, el lugar bonito y la relación calidad precio excelente.
Recomiendo el cordero por ser producto local. Probamos tanto la pierna como la caldereta y ambos platos fueron maravillosos. Volveremos seguro

Lourdes Morgado

Lugar exquisito y muy agradable. Servicio impecable y comida exquisita.

Ramón Vidal alsina

Entrar en Cal Marqués es un lugar bonito y acogedor.
La comida de este restaurante no es nada agraciada, lo pintan muy bien pero los sabores son muy sosos.
El arroz con patas de codorniz estaba pasado y sabía igual que un arroz blanco hervido, la única diferencia es que no era de color blanco, las patas de codorniz que le acompañan eran secas como si las hubieran sacado de bote.
El tartar de ternera, que decir, no sabía a nada.
Los postres, no puedo opinar ya que no llegamos a pedirlos por la decepción de la comida.
No volveremos a entrar en este restaurante.

Marta VG

Restaurante de proximidad con ingredientes de calidad y presentación muy elaborada. Fui a cenar y estuvo bien porque no tenía mucha hambre (las raciones son algo pequeñas). Nos pusieron un aperitivo de la casa muy rico. Las bravas muy elaboradas. De postre pedí pastel de queso, y me decepcionó un poco.